Este relato de Isaías 40:31-32 es muy conocido, siendo muy bien recibido como un mensaje de “fortaleza y esperanza”, basado por lo dicho en los versículos anteriores Isaías 40:28-29: «¿No has sabido, no has oído que el Dios eterno es Jehová, el cual creó los confines de la tierra? No desfallece, ni se fatiga con cansancio, y su entendimiento no hay quien lo alcance. El da esfuerzo al cansado, y multiplica las fuerzas al que no tiene ningunas». ¡Que hermosos versículos!
Amados hermanos y amigos, una vez que una persona ‘nace de nuevo’ pasa a formar parte de la ‘familia de Dios’, y por lo tanto Dios quiere y espera que esa persona ‘crezca’. Es algo similar a un nacimiento físico, donde todo padre/madre espera que su niño se desarrolle físicamente y mentalmente, ya que de no ser así resultaría preocupante.
Sí, todo nuevo creyente en Cristo podríamos decir que ha ‘nacido’ espiritualmente y el Señor espera que asimismo se ‘desarrolle y crezca espiritualmente’. Y ese crecimiento nos lleva a ‘ser semejantes a Cristo’. Estamos claros que durante nuestras vidas como creyentes será poco menos que imposible alcanzar la completa semejanza de Cristo, sin embargo la Palabra de Dios nos indica que esa es nuestra ‘meta’ y que Él es nuestro modelo a seguir.
Es evidente que en nuestro recorrido en la fe como ‘cristianos verdaderos’, inicia como si fuéramos niños que se van desarrollando hasta llegar a su edad de anciano, pero este caso lo llamamos ‘Crecimiento Espiritual’, lo cual es mencionado en la Biblia en 1 Corintios 13:11 «Cuando yo era niño, hablaba como niño, pensaba como niño, juzgaba como niño; mas cuando ya fui hombre, dejé lo que era de niño».
Pues bien dicho lo anterior, entendiendo que los versículos de la narración en estudio nos hablan no únicamente de ‘fortaleza y esperanza’, sino también de nuestro propósito como cristiano, que es avanzar de ser ‘un bebé en Cristo a ser una *novia* madura, preparada para el Esposo Celestial. (*Todos y cada uno de nosotros –hombres y mujeres- somos la iglesia, hago la aclaración porque estoy hablando de ‘novia’ en femenino).
Sabemos que una niña no está preparada para tener una ‘relación matrimonial’, por lo tanto debemos avanzar para convertirnos en una iglesia madura para luego ser transformarnos en una esposa gloriosa, la cual el novio, Cristo, pronto vendrá a buscar para vivir junto al amado por la eternidad.
Vemos en el relato que estoy comentándoles el crecimiento del que cree en nuestro Dios verdadero, y el cual lo podemos asociar con las tres etapas de todo ser humano, veamos:
1) Los muchachos levantarán alas como las águilas (Isaías 40:30a): Esto espiritualmente nos habla del joven cristiano, es decir es figura del nuevo creyente, quien lleno de vigor y juventud, ‘levantarán alas como las águilas’, es decir ‘renovará su plumaje’, o sea su vida será transformada y migrará de una vana manera de vivir a una nueva vida en Cristo. Su vuelo/cambio será tan sorprendente que muchos se quedarán boquiabiertos, en la nueva persona que el Señor ha dado al que en Él cree; esa es una vida nueva en su caminar en la fe, y que con su actuar dice «Me complace hacer tu voluntad, Dios mío, pues tus enseñanzas están escritas en mi corazón», [Salmos 40:8NTV].
Es bueno destacar, que esa condición de “los muchachos no se fatigan ni se casan», algunos eruditos de la Palabra de Dios consideran que es semejante a lo que dice en el Apóstol Juan en 1 Juan 2:12 «Os escribo a vosotros, hijitos, porque habéis conocido al Padre». Asimismo yo también lo relaciono con lo que dice1 Pedro 2:2 «Desead, como niños recién nacidos, la leche espiritual no adulterada, para que por ella crezcáis para salvación».
2) Los jóvenes correrán y no se cansarán [Isaías 40:30b]: Estos representan al creyente adulto, quien ‘correrá’, pues Dios le da la energía para no flaquear. Este es el creyente en su etapa de desarrollo; ya en esta etapa está firme en la fe, aun con situaciones a mejorar.
Algunos eruditos de la Palabra a estos los comparan con lo que dice en el Apóstol Juan en 1 Juan 2:14b «Os he escrito a vosotros, jóvenes, porque sois fuertes». Para mí también lo podemos asemejar con Proverbios 18:10 «Torre fuerte es el nombre de Jehová; a él correrá el justo, y será levantado».
3) Caminarán, y no se fatigarán [Isaías 40:31c]: Este el padre figura del creyente maduro, ‘caminará’. Quien ha alcanzado asemejarse a Cristo alimentándose de la Palabra de Dios y el Espíritu Santo. Finalmente algunos eruditos dice que esto es semejante a «Os he escrito a vosotros, padres, porque habéis conocido al que es desde el principio», [1 Juan 2:14ª]. Entiendo que también lo puedo asemejar con Hebreos 5:14 «Pero el alimento sólido es para los que han alcanzado madurez, para los que por el uso tienen los sentidos ejercitados en el discernimiento del bien y del mal».
En conclusión amados hermanos, sigamos hacia nuestra meta: «Hablando la verdad en amor, crezcamos en todos los aspectos en aquel que es la cabeza, es decir, Cristo. [Efesios 4:15LBLA].
Deseo finalizar recordándoles, como les he dicho anteriormente, que estos comentarios o anotaciones los emito ‘desde mi perspectiva particular’ en apego a los conocimientos propios obtenidos por mi estudio devocional de las Escrituras, la revelación del Espíritu Santo, así como por las enseñanzas compartidas por hombres eruditos de la Palabra de Dios. Por lo tanto, espero que mis anotaciones les sirvan a usted para continuar con sus lecturas propias de las Escrituras, las cuales sean transformadas en ‘escudriñar con gozo los tesoros que se encuentran en la Biblia, la Palabra de Dios’, de manera que también pueda identificar y ofrecer una aplicación especial y personal a su vida y así ser saciado del manjar que el Señor nos brinda en Su santa y bendita Palabra.
Dios les bendiga,
Sandra Elizabeth Núñez