El Apocalipsis, también conocido como el Libro de la Revelación, es el último libro del Nuevo Testamento. La palabra «Apocalipsis» proviene del griego apokalupsis, que significa «descubrir» o «revelar», lo que implica quitar el velo sobre algo oculto. El Apocalipsis tiene como propósito revelarnos a nuestro Señor Jesucristo en Su gloria, y descubrir los eventos futuros, incluido Su regreso para vencer al mal.
Ese libro fue escrito por el apóstol Juan alrededor del año 95 o 96 d.C., durante su exilio en la isla de Patmos bajo el gobierno del emperador Domiciano.
Apocalipsis ofrece una visión profética sobre el juicio final de Dios, la lucha entre el bien y el mal, y la victoria definitiva de Cristo sobre Satanás. Asimismo, describe la caída de Babilonia, el retorno glorioso de Jesucristo, la derrota del maligno y la instauración del reino eterno de Dios, todo lo presenta a través de personajes y símbolos. Lo más hermoso e impresionante para todos es que este revelador libro concluye con la promesa de una nueva Jerusalén y una eternidad con Dios para nosotros los redimidos.
Resulta importante hacer notar que el contexto histórico es clave para entender el libro. En esa época, los cristianos enfrentaban persecuciones severas bajo el mandato de Domiciano, quien exigía ser adorado como un dios. Los creyentes, que se negaban a inclinarse ante el emperador y afirmaban que solo Jesucristo es el Señor, eran considerados enemigos del Estado. Su lealtad a Cristo los llevó a ser perseguidos, y fue en este ambiente de opresión que Juan escribió Apocalipsis, alentando a los fieles a mantenerse firmes en su fe a pesar de las adversidades.
Mis estudios bíblicos:
A partir de este punto, compartiré con ustedes mi estudio personal del libro de Apocalipsis, utilizando también pasajes del libro de Daniel para comprender mejor las profecías, personajes y simbolismos. Como de costumbre, mis estudios bíblicos son devocionales, y los iré abordando versículo por versículo.
Una de las razones que motivaron a realizar este estudio y compartirlo con ustedes, es que recientemente he tenido el hermoso privilegio dado por mi Señor Jesucristo, de ser maestra en la «Escuela de Ministerio Formación Espiritual de las Asambleas de Dios» (programa online), impartiendo la clase de “Escatología”; precisamente hoy concluyo esa impartición, y la verdad que es una experiencia de gran bendición.
Es importante destacar que las infografías y materiales que estaré realizando y compartiéndoles se basan en mi estudio devocional de Apocalipsis, apoyado por obras de eruditos y enriquecido por lo que aprendido de las enseñanzas y prédicas que han impartido pastores como el Apóstol Sergio Enríquez y el maestro Werner Meyer.
Finalmente, hago eco de las sabias palabras del libro «Apocalipsis y Daniel» de la serie Fe y Acción: “Debemos ser humildes y admitir que todavía no sabemos todo. La advertencia de Pablo a los corintios es buena para nosotros: «…Aprendáis a no pensar más de lo que está escrito», [1 Co 4:6]. Y también las palabras de Moisés: «Las cosas secretas pertenecen a Jehová nuestro Dios; más las reveladas son para nosotros y para nuestros hijos para siempre», [Dt 29:29].
Deseo finalizar recordándoles, como les he dicho anteriormente, que estos comentarios o anotaciones los emito ‘desde mi perspectiva particular’ en apego a los conocimientos propios obtenidos por mi estudio devocional de las Escrituras, la revelación del Espíritu Santo, así como por las enseñanzas compartidas por hombres eruditos de la Palabra de Dios. Por lo tanto, espero que mis anotaciones les sirvan a usted para continuar con sus lecturas propias de las Escrituras, las cuales sean transformadas en ‘escudriñar con gozo los tesoros que se encuentran en la Biblia, la Palabra de Dios’, de manera que también pueda identificar y ofrecer una aplicación especial y personal a su vida y así ser saciado del manjar que el Señor nos brinda en Su santa y bendita Palabra.
Dios les bendiga,
Sandra Elizabeth Núñez
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