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El Evangelio de Marcos fue escrito por Juan Marcos, quien al parecer era hijo espiritual del Apóstol Pedro según 1 Pedro 5:13 «La iglesia que está en Babilonia, elegida juntamente con vosotros, y Marcos mi hijo, os saludan».

Marcos no fue uno de los doce discípulos pero la tradición considera que este Evangelio está formado por las notas, sermones y enseñanzas del Apóstol Pedro; por lo tanto es considerado por muchos como el “Evangelio del Apóstol Pedro”, debido a que es una narración cargada de acción y muy dinámica, siendo estas algunas de las características del Apóstol Pedro, las cuales salen a relucir en el uso de muchas palabras sinónimos de “inmediato”. Es bueno destacar que fue escrito para los para los Romanos, por tal razón tiene pocas citas del Antiguo Testamento.

El versículo clave de este Evangelio está en Marcos 10:45 «Porque el Hijo del Hombre no vino para ser servido, sino para servir, y para dar su vida en rescate por muchos». Es precisamente la condición de “siervo” que caracteriza a Jesucristo en este Evangelio; Jesús es reconocido como “siervo sufriente”, especialmente en el relato de Su muerte. Marcos presenta a Jesús como «el Siervo» (el Buey); sí, como el Siervo de Jehová (Isaías 42:1-2) «He aquí mi siervo, yo le sostendré; mi escogido, en quien mi alma tiene contentamiento; he puesto sobre él mi Espíritu; él traerá justicia a las naciones. No gritará, ni alzará su voz, ni la hará oír en las calles».

El principal tema de este Evangelio es “la redención” quizás por esa razón es que contiene más detalles sobre la pasión y sufrimiento de Cristo, quien siendo Dios Hijo vino voluntariamente a esta tierra para cumplir con la obra redentora, con Su muerte en la cruz por los pecados tuyos y míos, permitiendo esto restaurar nuestra relación con Dios y poder ser hijos de Dios por adopción, así como participes de la vida eterna conjuntamente con Él.

El Evangelio de Marcos es el más breves de todos, solo tiene 16 capítulos, lo que hace fácil su lectura. Es mi deseo que usted pueda iniciar la lectura de este poderoso Evangelio; por lo que durante la misma estaré ilustrando algunas de enseñanzas relatadas en este Evangelio por lo que desde ya elevo mi oración al Padre para que las mismas puedan reflejar con exactitud lo que dice la Palabra de Dios y para que cuando ustedes las reciban se motiven a estudiar este libro en búsqueda de saciar el hambre que tienen de la Palabra de Dios, de forma tal que el Espíritu Santo nos ilumine a todos para que podamos entender las revelación de las profundidades expresada en su Santa Palabra, poner por obra lo aprendido y luego discipular a otros. Te lo pido Padre en el nombre de Jesús.

Deseo finalizar recordándoles, como les he dicho anteriormente, que estos comentarios o anotaciones los emito ‘desde mi perspectiva particular’ en apego a los conocimientos propios obtenidos por mi estudio devocional de las Escrituras, la revelación del Espíritu Santo, así como por las enseñanzas compartidas por hombres eruditos de la Palabra de Dios. Por lo tanto, espero que mis anotaciones le sirva a usted para continuar con sus lecturas propias de las Escrituras, las cuales sean transformadas en ‘escudriñar con gozo los tesoros que se encuentran en la Biblia, la Palabra de Dios’, de manera que también pueda identificar y ofrecer una aplicación especial y personal a su vida y así ser saciado del manjar que el Señor nos brinda en Su santa y bendita Palabra.

Dios les bendiga,

Sandra Elizabeth Núñez

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