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43.44 Los Judíos Rechazan a Jesús

 Este pasaje acontece durante la fiesta Hanukkaho fiesta de la Dedicación, la cual era celebrada durante ocho días para rememorar la victoria judaica en uno de los períodos de mayor tribulación y heroísmo que vivieran los judíos. 

El rey de Siria, Antíoco Epífanes, quien reinó durante los años 175 a 164 a.C. decidió eliminar la religión judía e introducir el pensamiento, la religión y los dioses griegos, por lo que en el año  170 a.C.  Antíoco atacó a Jerusalén, llegó al extremo de dedicar el gran altar de los holocaustos a Zeus Olímpico, y a ofrecer sobre éste 61 sacrificios de puercos a los dioses griegos, es decir los atrios del templo fueron profanados.  Se dice que luego de tal envelecimiento perecieron cerca de 80,000 judíos, y que otros miles fueron vendidos como esclavos.

Judas Macabeo y sus hermanos iniciaron su heroica lucha por la libertad. En el año 164 a C. los judíos ganan la guerra, por lo que limpiaron el templo de toda contaminación, y luego procedieron a la purificación del Templo de Jerusalén de los iconos paganos; por lo tanto, esta fiesta se llamaba a veces de la Dedicación del Altar; otras Memorial de la Purificación del Templo, y también el de la Fiesta de las Luces.  Esta fiesta se celebra hasta el día de hoy.

Les hice un breve resumen de la fiesta que se celebraba al momento del relato comentado, para hacer notar con qué ahínco los judíos defendían su religión, la cual conocían al dedillo, y cómo resulta contrastante que el Mesías esperado estuviera frente a ellos y no lo aceptaran.

Dice la Biblia que Jesús estaba paseando por el pórtico de Salomón, y a ese lugar acudía la gente para orar; y los rabinos frecuentaban pasear por allí de una manera muy particular, hablando con sus alumnos y explicando las doctrinas de la fe.  ¡Qué hermoso! allí estaba nuestro amado Jesús, y de inmediato se le acercaron los judíos:  «Entonces los judíos le rodearon, y le decían: ¿Hasta cuándo nos vas a tener en suspenso? Si tú eres el Cristo, dínoslo claramente», [Juan 10:24LBLA].  La respuesta de Jesús fue la misma que ya les había dicho antes, adicional que había presentado sus credenciales. 

Es bueno saber que evidentemente algunos judíos querían saber de verdad quién era Jesús, sin embargo, la mayoría lo que quería inducirle a que dijera que era Hijo de Dios y de esa manera acusarle de blasfemia.

Nuestro Amado Señor expresó Su confianza en el Padre, les hacía ver que todas las cosas tenían su origen en Él, por eso vuelve a repetirles a ellos que no les creen porque no son Sus ovejas, y que Sus ovejas, que Dios le dio, oyen Su voz y le siguen.

Estas son las hermosas promesas que nos da a los que le aceptamos como nuestro Salvador:

  1. Vida Eterna: Conocerían la gloria de la vida de Dios.
  2. Vida sin fin: Conocerían la gloria de una vida indestructible.
  3. Vida segura: Nada ni nadie los podría arrebatar de Su mano.

Mis amados amigos y hermanos, como todos sabemos Jesús es el Ungido prometido de Dios.  Jesús habló de la unidad de Él con Dios la cual viene del Perfecto Amor y la obediencia hacia el Padre.  Nos sentimos más que bendecidos de haber aceptado a nuestro Señor Jesús como nuestro Salvador; por haber salido de las tinieblas a la luz admirable, y por tener esa Salvación tan grande que nos lleva a la Vida Eterna junto con nuestro Amante Padre Celestial y nuestro Señor Jesucristo.

Deseo finalizar recordándoles, como les he dicho anteriormente, que estos comentarios o anotaciones los emito “desde mi perspectiva particular” en apego a los conocimientos propios obtenidos por mi estudio devocional de las Escrituras, la revelación del Espíritu Santo, así como por las enseñanzas compartidas por hombres eruditos de la Palabra de Dios. Por lo tanto, espero que mis anotaciones les sirvan a usted para continuar con sus lecturas propias de las Escrituras, las cuales sean transformadas en ‘escudriñar con gozo los tesoros que se encuentran en la Biblia, la Palabra de Dios’, de manera que también pueda identificar y ofrecer una aplicación especial y personal a su vida y así ser saciado del manjar que el Señor nos brinda en Su santa y bendita Palabra.

Dios les bendiga,

Sandra Elizabeth Núñez

1 comentario en «43.44 Los Judíos Rechazan a Jesús»

  1. DIOS ME LA BENDIGA QUERIA HERMANA QUE MI DIOS TODOPODEROSO Y MI SENOR JESUS Y LA OBRA MARAVILLOSA DE SU SANTO ESPIRITU TW SIGA BENDICIENDO Y SABIDURIA DE LO ALTO Y QUE SU BENDITA Y ETERNA PRESENCIA NUNCA TE FALTE ES UNA BENDICION YO ESTOY ESTUDIANDO TODO PREPARANDOME PARA HACER DISCIPULOS PARA EL REINO DEMI SENOR JESUS POR FAVOR SI TIENES LOS ESTUDIOS DE APOCALIPSIS TE DEJO MI COREO DIOS TE BENDIGA SIERVA DEL ALTISIMO

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